Con la nariz colorada y un espumoso embotamiento mental, llego ahora de la playa, crujiente del salitre sucio del primer baño en el Orzán. Si lo habéis adivinado, estoy de vacaciones, en Lacoru, y por suerte el tiempo acompaña y me deja disfrutar de uno de los pocos placeres de los que carece Compostela, zapatearse en la arena con un buen libro y pegase unas brazadas zarandeado por las olas. Si hubiese tenido con quien echar una partida de tute cabrón, sería como volver a la adolescencia *escalofrío*.
¿Anodina entrada? Sí señores, anodino quiero estar, tras haberme comido las gafapastadas del día de las Letras de Usted (17 de mayo) y el politiqueo de la campaña municipo-nacional. Brrr.
P.S.- Para que los que están en el curro no me odien demasiado, una recomendación para perder el tiempo: The Order of the Stick, webcómic que sin duda les arrancará unas risas a aquellos que conozcan el sistema D&D.