14.11.06

El juego de las diferencias

Confesaré una cosa que sin duda me hará aún más impopular entre mis lectores y no lectores: no quiero ser diferente. Sé que es fundamental para la vida moderna, me lo dice la publicidad, me lo dice la élite intelectual, me lo dicen los partidos políticos y las revistas de música, pero aún así no me interesa lo más mínimo... y eso que he pasado por terapias de choque y descargas eléctricas, reuniones de Integrados Anónimos y recitales de poesía de vanguardia, pero ni con esas.

Es grave ¿no? Ante esta sociedad que nos aliena, que fabrica en serie nuestros gustos e ideas, la batalla por la diferencia es la única que merece la pena, la lucha por ser tú mismo entre un montón de zombis asalariados es la única salvación. ¿No?Pues no. La búsqueda ciega de la diferencia no es más que otra forma de alienación, en la que uno vive no por sus convicciones, sino por oposición a los demás.

Hay que preocuparse por vestir lo más raro posible, tener piercings en lugares inverosímiles (las membranas dactilares, por ejemplo), escuchar música que no conozca nadie, ir a bares de clientela selecta, leer libros con menos de 100 ejemplares por tirada y sostener opiniones que escandalicen a los burgueses, sean sensatas o no. En general, todo eso supone un esfuerzo ímprobo y no te hace ser mejor persona, ni más brillante. En lo único en lo que superarás a la gente con gustos más convencionales es en la cantidad de dinero que te tienes que gastar.

Reconozcámoslo, emperrarse en ser diferente sólo sirve para convertirse en un pelele de la moda. En cuanto echan en MTV el vídeo de las Truñing Sisters, ese grupo de soul-smash-folk-acid que tanto te gustaba, tendrás que dejar de escucharlo, porque se ha vendido al sistema. En cuanto uno de los personajes de Rebelde Way se pone esos aros para expandir los lóbulos de las orejas, tipo tribu de la sabana, los tuyos ya no molan, pues son parte de la estética asimilada. Y así hasta el aburrimiento y la extenuación de la cuenta corriente.

Por eso yo prefiero escoger mis gustos según... lo que me gusta. Sí, sí, ya sé que es una palurdada sin estilo ninguno, y que luego voy por ahí leyendo el Friendly Neighborhood Spider-Man, escuchando discos de Queen, y argumentando que la revolución no se hace en los bares, pero me canso menos que los que tienen que cambiar de personalidad cada seis meses, aunque a veces me vea obligado a coincidir con los demás.

Es... curioso... que tras tantas luchas sociales en los siglos XIX y XX para conseguir la igualdad de todos los homo sapiens, ahora que las gentes del primer mundo podemos vota (por cuatrienios), denunciar a quien te pegue una paliza (si no es madero), vestirnos como nos dé la gana, escuchar la música que nos salga del emule, opinar en voz alta sin que te metan en la cárcel y resistirnos a ser violados, nos obsesione el ser distintos de la masa, una élite alejada del populacho como los nobles del Antiguo Régimen.

Creo, sinceramente, que todos somos muy distintos unos de otros, por educación, ADN, vivencias y dinero. No hace falta, pues, insistir en la diferencia. Creo también que aún nos falta mucho para ser iguales más allá del Código Civil y que lo que te hace libre no es vivir en una torre de marfil, sino el tener las mismas oportunidades de elegir que el resto de tus congéneres. Cuando las opciones son muchas, es imposible que nadie marque un camino prefijado, adiós a la alienación.

Así que ahora ya lo sabéis, está claro que soy un caso perdido.

22 comentarios:

Arale Norimaki dijo...

Buen intento, pequeño villano.
Sigue así y conseguirás que la "thought police" nos extermine a todos...
Sabes cuántos miles (sino millones) de trabajos, corporaciones y bienpensantes estructuras mentales podrías llegar a destrozar con esas proclamas radicales??
Que su fideeza te proteja!

A.F.Torreiro dijo...

Coño duende... Estoy de acuerdo en todo... Eres igualito a mi (¿o yo a ti?) ;)

Anónimo dijo...

Hmmm, eso de no querer ser diferente mientras que todo el mundo quiere serlo, ¿no te hace a ti el más diferente de todos?
Eso me recuerda a la escena de "La vida de Brian" en la que la muchedumbre que seguía a Brian ciegamente proclamaba: "¡Sí, todos somos diferentes!", y a continuación uno decía: "Yo no."

Anónimo dijo...

Ben, tiña pensado escribir un post longo e crítico, pero como xa o comentamos en persoa e chegamos a un acordo... será que non somos moi diferentes.

Aínda así, eu quixera facer unha diferencia entre aqueles que procuran distinguirse pola estética , polo seu aspecto externo (os famosos "pijo-alternativos") e aqueles que por inquedanzas persoais buscan un tipo de cultura que os medios de masas non ofrecen -aquí entrarían en xogo os devaluados adxectivos "indie" ou "alternativo"-.

Porque non nos engañemos, os adolescentes socialmente mal considerados nos institutos non son precisamente os que son como os demais, senón os "friquis", os que len libros, os "raros".

Por exemplo, eu vou ir a Cineuropa esta noite a ver unha peli de Kaurismaki, non por diferenciarme da masa, senón porque pola tele non a van botar nunca.

Anónimo dijo...

Si bueno, lo de lo pijo-alternativo, y los requisitos para ser diferentes a los demás me recuerda el chiste de:

" * Mira el Ché, luchó toda la vida contra el sistema y mira como acabó.
* ¿Cómo? ¿Muerto?
* No, en camisetas, calzoncillos, toallas..."

PD: has incluido en la misma frase palurdada y Queen, ¿quieres decir algo con eso? (y así continuamos el tema anterior de las teorías conspiratorias sin sentido :))

Anónimo dijo...

bueno, eu ía facer exactamente a mesma puntualización ao post que vexo que fixo elric, así que me calo porque xa vexo que tan diferente non son, ;D

un saúdo.

Bautista dijo...

Es cierto que siempre da un aire interesante que tus gustos no sean compartidos por casi nadie, que tu estilo de música sea casi desconocido, etc. Parece que si coincidimos en algo, dejamos de ser plenamente originales, e incluso nos jode no ser los primeros a los que les entusiasma un grupo o una marca de zapatillas.

Es raro porque tiempo atrás, en mi caso me sucedía lo contrario. Siempre sentí una mezcla de admiración y envidia (de la mala) por el típico ligón del instituto, que había repetido curso pero daba igual porque las traía locas a todas. Ahora lo pienso y me río, pero de aquella el tema no tenía puta gracia...
Duende, en algunas cosas es inevitable ser diferente. O aunque tú no lo creas, los demás te suelen ver así. Único.

Anónimo dijo...

Sí, es verdad, hay una curiosa tendencia a pensar que por ser distinto de la mayoría se es mejor. Fijémonos en el origen de la palabra "aristócrata"· Obviamente, en este caso, la diferencia no está tanto en ser "bello" y "bueno" ("kalós kai agathós") (¡Viva 'Eladio!) como en tener "buenas" y "bellas" propiedades. Y es que sólo hay una gran diferencia entre los hombres (y mujeres, claro): tener y no tener. Lo demás son zarandajas.

Anónimo dijo...

¡Duende, intégrate, sé diferente como todos nós! Be different my friend

Anónimo dijo...

Esta é a terceira vez que escribo este comentario (RRRRRRRRRRRRRRRRR):
-Creo que nunca estiven tan de acordo cun post que escribises e iso, diría un dobrador da galega, "é fodido".
-Kurt Vonnegut dixo que ser demasiado normal é a maneira máis estrema de ser raro.
-Sempre intentei integrarme no universo ata que me decatei de que o único xeito de conseguilo era marxinar ao universo enteiro salvo unha pequena parte onde caber. A Creación Pastafárica non está deseñada para o tamaño humano senón para o tamaño do Monstruo Voador de Espaguettis.
-Confeso que envexo á xente máis convencional. Sempre me considerei un tipo moi normal para ser raro.
-Alégrome moito de ler este post. Creo que sen ningunha dúbida é o máis logrado e representa unha clara digievolución no teu xeito de escribir: preciso, claro,enxeñoso, sintético, persoal, sarcástico, humano...
-Tamén me congratulo de que teñas unha rede tan vizosa de comentaristas. Iso é un síntoma evidente de que ten interese. Tamén me alegro de que prescindas dos rasgos propios de Francisco Ibañez (Este é o pao)
-Non responda con comentarios felacionais nin ruborizándose coma Pedro J. coa roupa interior de Exuperancia. Cita a Simpsons, Futurama, o Autoestopista Intergalactico ou calquera outra lectura canónica e filial.
Noraboa e gracias.

elduende dijo...

Bueeeno, primero daros las gracias por la cantidad de respuestas, especialmente a PePedante y a moucho branco por aquello de que son nuevos. Creo que diez comentarios (once, contando este) en 24 horas es el récord del blog. Os respondo como merecéis.

Arale, estoy seguro de contar con la protección de Su apéndice de fideos, como uno de Sus más fervorosos creyentes, pero no creo que a la policía del pensamiento le preocupen lo más mínimo mis soflamas.

Zónula, tu lo que eres es igualico, igualico que el difunto de tu agüelico.

Pepe(dante), sí, me has descubierto. Esto es parte de mi malvado plan para demostrar que yo soy el tío más raro del mundo ¡BWA-HA-HA!
No, ahora en serio. Lo que intento decir es que la oposición entre DIFERENTE e INTEGRADO no tiene sentido, y que obsesionarse con sobresalir del común de los mortales es una mala forma de invertir el tiempo. Y, por cierto, los del Frente Popular de Judea sois unos disidentes.

Elric, tienes razón. Lo que critico no es el tener gustos distintos a los mayoritarios, cosa que está muy bien, sino el evitar a toda costa coincidir con la mayoría, y eso pasa tanto por ver sólo pelis armenias en versión original como por tunear el coche o emperrarte en tener el teléfono más modelno del mercado. Simplemente son vías distintas de asimilar la marginación adolescente.

API, aunque te escandalize, los redactores y lectores de la Rockdelux y similares consideran que Queen es una palurdada. Ahora, lo que es a mí, me gusta.

Moucho, pues lo mismo que a Elric, y va el saludo de vuelta.

Bautista, yo soy único, tu también, Diego Tristán también, y hasta el papa Ratzinger, si me apuras. Supongo que sí, que se puede decir que yo soy un tipo raro, pero serlo más que los demás no es una de mis preocupaciones.

Frede, nada que añadir. Estoy muy de acuerdo contigo. ¡Viva ‘Eladio!

Señor doutor, me devuelve usted el ¡touché! de hace unos días, pero repito mi argumento, la dialéctica diferente-integrado no ha lugar.

Nadador, ¿quieres una cita de Futurama? Pues va: “¿Ah sí? ¿Me echáis? Pues pondré mi propio módulo lunar. Con casino. Y furcias”. Bender Bending Rodríguez.

Anónimo dijo...

A diferenza, pese ás mensaxes publicitarias e ós cool-hunters, segue vixente, pero noutro plano. De nada sirve vestir "distinto" cando levas a mesma caste de vida que os demais. A diferenza pola que aínda paga a pena loitar é aquela que se define no estilo de vida. E moi poucos poden encaixar nesa fuga. E menos a través do consumo, por moi "alternativo" que sexa (lembrai o aforismo de Juanjo Sáenz: "Son igual de diferente ca ti")

Os diferentes merecen un respecto: cando menos aqueles que si puideron desactivar os mecanismos coercitivos da sociedade. Afortunados eles! Pero a receita (se a hai) non é sinxela, e vai moito máis aló de para que empregues os teus cartos ou que valores defendas (dende a cadeira) Cando alguén coñeza a un "diferente" que me avise e mo presente, por favor: algúen do que aprender (máis do habitual).

Anónimo dijo...


API, aunque te escandalize, los redactores y lectores de la Rockdelux y similares consideran que Queen es una palurdada.


¡¡¡¡Herejía!!!! (o eso o soy un palurdo)... ya sabía yo que había algo en rockdelux que no me gustó aquella vez que se me dió por verla.

Pero bueno, es lo que tiene la música, que lo de si un grupo es bueno o malo es de las opiniones más subjetivas que uno pueda tener (otra razón para tomar con cuidado las páginas de opinión musical, después de todo, hasta el
"tío de judas"
reconoce que el reggeton es un género musical perfectamente válido en cuanto que le gusta a mucha gente).

PD: hmmm, creo que esta respuesta se ha salido de la tangente con respecto al post. Espero no parecer un troll ...

elduende dijo...

Camarada enantena, ¿en serio cres nuns seres “diferentes” liberados de todas as ataduras da sociedade e que poden guiarnos cara o cambio como gurús alternativos? ¿De quen se trataría? ¿Dos artistas que non venden a súa obra? ¿Dos que viven en casas okupas? ¿Dos musicos da rúa?
Se é así, permíteme, coma sempre, que sexa escéptico, pois toda esa xente segue precisando da sociedade á que repudian para sobrevivir, xa que nin cultivan a súa propia comida, nin fabrican as súas propias mediciñas, entre outras cousas. Está ben como solución para traballar pouco e non pagar impostos, pero como senda de iluminación... pois por un lado ti xa ves, e por outro, ¿que queres que che diga?

Zenone, ¿diferenciarse da masa ou ser igual que os outros diferentes? As dúas respostas son correctas. E o teu amigo, ou e un sabio, o un demagogo da hostia, tería que coñecelo para decidirme.

API, non te preocupes, trolea todo o que queiras.

Baubita dijo...

Pues sí que llevo tiempo lejos de la blogsfera... Nueva decoración en tu blog eh?? Prometo volver mas. Por cierto,en clave propia..???

Anónimo dijo...

O problema non é que exista "xente diferente", senón que haxa algúns que fachendeen de selo. Iso é o que nos pon malos a todos.

Eu antes non falaba de diferencias á marxe da sociedade. Máis ben o interesantes son as que fican dentro dela. Non se trata de vivir "fóra do sistema", senón de ser quen de sobrevivir a el sen renuncias, resistindo tódalas obrigas uniformizadoras, e indo máis aló delas, na dirección que a cada un máis lle interese.

Non hai ningún grupo de iluminados que sexan diferentes polo que fan (un okupa pode ser tan banal como un adicto a operación triunfo), o desafío está en localizar a aqueles que, fagan o que fagan, poden sobrepoñerse a tantas miserias.

Non fai falla sinalar a ningún colectivo para converternos á súa fe. Chega con ir por alí e atopar un día a alguén con tantas ganas de vivir que te faga esquecer o contexto no que o atopas, que trascenda o lugar e o tempo do encontro, máis aló de se é de día / de noite / se hai que xantar / ou que durmir / se estás nunha casa / propia ou allea / nun bar / nunha praia (vai quedando claro, non?). Iso si que sería diferente.

Provocación de balde: Conformarse con seguir a corrente é unha forma de colaboracionismo!!!

A.F.Torreiro dijo...

Eso me recuerda a un chiste de un gran humorista...

"¿Qué haces Miguelito? ¿Por qué no ves la tele?"

"Porque soy un incoformista y no quiero pertenecer a esa gran mayoría que ahora mismo está viendo la tele"

"Pero entonces estás perteneciendo a esa gran mayoría que ahora no quiere ver la tele"

"..."

"¿Qué estarán echando?".

Si ser diferente es algo tan banal como comer a las 5 de la tarde, cenar a las 4 de la mañana y desayunar a las 2 del mediodía amén de irse a trabajar a una playa relajado cuando te apetezca para huir del sistema pues... Entonces no sé si estamos dentro de un anuncio de Hugo Boss o de Tommy Hilfinger (o como coño se escriba que no me apetece buscarlo en google)

Anónimo dijo...

Replicando a "enantena":

Pero logo, en que consiste esa diferencia que ti admiras?

En ter gañas de vivir? (pregunta retórica). Penso que na vida hai momentos nos que tes gañas de vivir a tope novas experiencias e outros nos que prefires facer cousas rutinarias pero que che satisfacern; días nos que non te queres levantar da cama e e noites nos que non te queres deitar.

Estou convencido(e sabes ben que sei do que falo) que a felicidade e a autorrealización están no equilibrio e non en "trascender" o momento -algo imposible por outra parte-. Non podes trascender o momento; non existe a trascendencia, somos materia pura (síntoo polos crentes pero eu non o son).

Non podemos facer como o protagonista de "American Beauty" e poñernos a fumar porros para saír da alienación. A saída é outra, e aí estou con "elduende": os bares están de puta madre, pero a revolución non se fai neles.

elduende dijo...

Largo el debate ¿eh? Decididamente hemos batido el récord de comentarios, ademas se sacar temas como para seis o siete posts.

Baubita: Bienvenida de vuelta, pues ¿No te convence el slogan? Admito sugerencias de cambio.

Enantena, zenone, zónula y elric, va una respuesta conjunta.
Entre el que compra la primera edición en turco-chiprita de las obras de Nizkametis Kaliskan porque quiere demostrar que es distinto de la masa vulgar, y el que lo hace porque quiere ser igual a sus amigos culturetas, no hay mucha diferencia. Lo importante es saber si este tío se va a tragar semejante rareza bibliófila porque le gusta, lo cual es absolutamente respetable, o sólo por no ser chusma/ser elite cultural. Ese es el matiz, entre ser diferente (o tener criterio personal) y presumir de serlo (o ser un pelele de la moda).

Por lo demás, como criatura mezquina y vulgar que soy, tiendo a desconfiar de los espíritus libres, porque suele preocuparles poco si perjudican o no a los demás. La frontera entre diseñar tus propios horarios según tus deseos y llegar una hora tarde a todas partes, o quedar con alguien y no aparecer, es delgada. Igual que la que hay entre ser un abanderado del amor libre y tratar a tus amantes como si fueses su proxeneta. Me temo que suscribo todas y cada una de las palabras el último comentario de Lord Elric.

Anónimo dijo...

Joé no sabia yo que la cosa estaba siendo tan movida.. Solo una cosita (xq tengo prisa q ME VOY A ARMENIA)yo pienso igualito, igualito que todos los que no son diferentes. Chapó Duende, el mejor post para mi gusto e incluso una de las mejores reflexiones q t he oido..

Anónimo dijo...

Horror!

Un anuncio na tele de Galletas Reglero fachendea de que estas ningunha destas galletas sabe igual a outra, é dicir, que son unhas GALLETAS DIFERENTES!!!

Noooo!!!

Eu o que quero é que sigan sabendo igual que hai vinte anos, cando as coñecín na tenra infancia...

Ningún mito atura o paso do tempo

elduende dijo...

¡NOOO!, las Galletas Reglero, no, por el Buda Amida. ¿Es que esos bastardos no respetan nada? Amigo, enantena, no nos va a quedar más remedio que poner nuestra propia fábrica de galletas no-diferentes. Con casino. ¡Y furcias!

La mona, puede que esta sea una de las mejores reflexiones que me has oído, pero como la mayoría de lo que digo (y escribo) son tonterías, no tiene mucho mérito. Felices vacaciones en Erebán.